Ejes para girar - Contraverso


Buscaba el centro de su vida; el eje
en el que pudiera forjar su existencia
soberana, en libertad; el esqueje
del que brotaría el Árbol de la Ciencia,
y tantas cosas más.
*
Caminaba en silencio ortodoxo
por las rectas calles de la ciudad.
En los bloques, mármoles de piedad
suplicaban futuros rocosos
bajo la égida de algún dios.
Devoraba el cielo trozo a trozo,
de tonalidad en tonalidad;
devoraba vestigios de la edad
en los sillares intempestuosos,
de la neumonía y la tos.
Caminaba, y sin previo aviso
se durmió en el pecho el corazón,
la razón perdía la razón
y se abalanzaba de improviso
clavándole sus púas de erizo,
como suele hacer, sin compasión,
pero no supo que Tradición
es el concepto más insumiso.
*
Buscaba las viejas nuevas metas
en la laurisilva y su sudor,
en esos troncos que crían setas
para llenar el bosque de color,
y pocas cosas más.
*
Fue hasta donde ondeaban las banderas
a ver si algo conseguía entender;
le preguntó a las cuerdas de tender,
a las farolas y a las aceras:
no encontró respuesta verdadera,
ni pudo distinguir ser de no-ser
ni tampoco supo como ejercer
los secretos de esta vieja esfera,
del planeta Tierra.
*
Sombra de la sierra
por varios milenios de dominación,
primero los dioses iracundos, ciegos
al sufrimiento, despóticos primeros
rayos de luz de la civilización.
Tras siglos de guerra
las personas quedaron reconocidas
y una de ellas se encargó de la justicia,
neutral, contra todo atisbo de malicia
¿pero era posible en una humana vida
albergar tal miseria?
*
Al final, abolida la neutralidad,
o erigida en las decisiones humanas,
pudimos elegir con total libertad
los valores que nuestras leyes dimanan
y tantas cosas más (humanas)


(Fuente: https://www.flickr.com)

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