LA GALERÍA DEL SUBURBIO por zvonimir r. staničić pérez ENTREGA 50 (“re-vival”)

“Performance sobre exposición fotográfica de Nobuyoshi Araki” (2016).

 


Deborah de Robertis (1984 –Luxemburgo-)



Imagen extraida de: http://www.wort.lu/en/culture/new-performance-art-deborah-de-robertis-is-at-it-again-57ce8abaac730ff4e7f65ffd




            Entrega “50” bravo y tal…, en serio…, esto no iba a suceder, no lo iba a hacer, no se me dan estas cosas, pero ha sucedido; el caso es que empezaba esta sección –la entrega nº 1- con “El Origen del Mundo” de Courbet, si “coño”, el famoso cuadro del “chocho” -por cierto, que buena elección para empezar la sección- y hacía relativamente poco que la artista conceptual, performancer o como queramos llamarla, Deborah de Robertis –que nombre más apropiado- hacía una “reinterpretación” en vivo del famoso cuadro en la también famosa galería parisina, sentaba  en el suelo -de espaldas al cuadro-  mostraba estirando los labios vaginales: “El Origen del Mundo” –mientras sonaba el “Ave María”- a los visitantes del museo.

            Comenté entonces esa anécdota en la famosa “Entrega nº 1” que le valió un “Oh, no, no, no…” por parte de la comisionaría de la exposición y otras mujeres que intentaron tapar su sexo con carpetas de secretaria hasta que llegó la inquisición en forma de vigilante de seguridad a poner “orden” en medio del aplauso del público.

            Sucesivos trabajos de la Robertis se han premiado con escándalos, expulsiones y detenciones -estás cosas que tanto nos gustan a los aficionados al arte- y entonces resulta que poco antes de la redacción de esta “Entrega 50” (que es tan mediocre como cualquier otra) me entero de que Deborah la ha vuelto a liar, esta vez en una exposición también parisina, pero en este caso de “Araki”, ese japonés también polémico y tachado de misógino por algunos grupos feministas, cuya esposa murió de cáncer de ovarios  después de realizar una sesión fotográfica con ella…

            De Robertis aquí eclipsa la obra expuesta -¡Qué maravilloso! Pero al igual que con Courbet, la artista no juzga, no destruye, no se posiciona, -para eso están los beatos y el escarnio en las redes- ella reinterpreta la obra expuesta causando idénticas  encontradas posiciones entre organizadores y visitantes, en estos tiempos oscuros de hipocresía, dictadura del bien estar y reinado del dinero que estamos viviendo.

            Nunca sabremos que hubiera dicho Courbet de la actuación de Robertis y tampoco sé lo que dijo –si es que dijo- Araki (ahora con 76 años) en la suya… si alguien lo sabe, que me lo haga saber.



Bibliografía:



*http://www.jotdown.es/2011/10/araki-amor-y-muerte/










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