Canción del algodón - Contraverso

Entre sprays y cartones,

entre camisas de algodón,

bailando por los rincones

vino a besarme una canción;

era una canción chiquita

pero llena ella de emoción,

derriscada como pitas:

las queridas de Posidón.

Y un trilobites me grita

“¿A dónde se te fue el valor?”

Se fue al agua, que me invita

a irme a una Atlántida mejor,

con algo menos de grifo,

y algo más de cañería,

¿qué fósil no prevería

en qué se iba a convertir su hijo?

Vestido de suave algodón,

“¡Coño! ¡Niño presuntuoso!”

Pero también orgulloso,

que no es grifo, sino dragón.

Entre camisas de algodón,

chocolate y un té frío

¿quién diría que ese dragón

iba a ser el dragón mío?

“Pero cállate, chiquillo,

que nadie vive de ilusión”

Mira cómo brilla el brillo

de este dragón, mojo picón;

piconcito, a callarse,

que ya se va poniendo el Sol,

ya comienza a congelarse

¡Madre Magek! Todo el calor.

Y desde que te largaste,

querido, con todo el color,

no crecen tajinastes

y al tuno no le nace flor;

“¡Qué resuene el tajaraste

y sea el mundo algo mejor!”

Así se aguantó el desgaste

moderno de pies y manos,

porque somos muy modernos

pero demasiado humanos

como para no entendernos,

tabaibita, a estas alturas

Nietzsche, dí tú lo que quieras.

Tira el carro de la mula,

se retuercen las higueras

y se desdoblan las curvas

mientras Bobadilla espera

a que, las ya muertas turbas

gomeras, cobren venganza

¿Do´ está, ahora, tu lanza?

Entre sprays y cartones

me acordé de aquella canción,

en la hoja, varios tachones,

tachones y mucha ilusión.

(Fuente de la imagen: https://ecoinventos.com/razones-comprar-productos-fabricados-con-algodon-organico/)