Más que idiota (Sección "Lluvia de piedras")





Se había sentado junto al viejo que parecía el propietario de aquel banco y, sin darse cuenta, le contaba su problema con toda confianza. Su pareja la había engañado con la chica que limpiaba en casa. Tras un arrepentimiento sincero, su relación siguió adelante. Pero, después de despedirla y contratar a otra, había vuelto a pasar: les había encontrado en pleno orgasmo… Ahora, de nuevo, empezaban a hablarse y tenía esperanza en retomar la relación.

El anciano le dijo: “Si una persona te engaña es posible que sea muy mala gente; pero si te engaña de nuevo, tú, eres idiota”. Antes de salir del todo de su asombro, mirando cómo se alejaba el viejo, fluyó toda su determinación y sentenció en voz alta: ¡Se acabó el servicio doméstico!

 

Comentarios

Entradas populares