Contraverso. Individuo en sociedad individual

Cuando se está más solo que la una,
bajo la sombra y el aire impuro
de la gran ciudad, suelen dar ganas
de renunciar a suerte y fortuna
cualquiera, abjurar del futuro,
considerar cualquier cosa vana,
y, como diría Extremoduro,
hacerse un tambor con los escrotos.
Bueno, pero tú no sirves para
eso. Ni que fueras un crash test dummy,
eres algo más que un coco roto.
Tampoco eres un niño de mami:
hace tiempo que abriste las alas,
será cuestión de encontrar tus pares,
de seguro te estarán buscando,
lo típico, hasta bajo el piso,
ni Banksy es tan escurridizo
aunque tú no andas por esos lugares,
tú eres más de tomar el mando.
El fútbol es una buena forma
de encontrar esos iguales, pero
como ya he dicho, tú quieres mandar,
más allá del mando no hay ni normas
ni leyes. Tú siempre eres primero,
eterno pichichi individual,
el equipo es tan solo un adorno,
secundario, fácil de sustituir.
¡Ah! Pero se cansaron. De nuevo
solo y aburrido de tu entorno,
como vivir así es un sinvivir
tendrás que levantarte del suelo,
Ave Fénix, solo tú, tú solo,
self-made man, te sabrás recomponer,
somos las pulgas de un enorme can,
somos Roma saqueada por godos
¿qué importa? No se te puede vencer,
¡Lo intentarán, pero fracasarán!
Expresa en tinta tu gran soledad,
como tus problemas son mayores
que los del resto del Universo.
Qué decepcionante la humanidad
que no se te postra, qué perverso
que otros quisieran meter tus goles.
Fuiste fundador de un club de amigos
para ti solo, grabaste un disco
que disfrutas en tus noches solas.
Tomaste las riendas de un partido
y gobernarás a las gentes todas.
¡Qué trágico! ¿No? Siempre lo mismo.

(fuente: https://www.flickr.com)

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