Relato nº9 - Tu país

Produzco eclipses solares cuando las yemas de mis dedos pálidos se pasean sobre tus lunares, se consuma el tacto en la constitución de tu piel.

Redacto por sobre líneas imaginarias los poemas futuros que morirán en tus labios, andan mis manos en el lienzo preciso de tu piel de caramelo, adormeces entonces los sueños probables de todas las cosas, me fundo a parte igual de delirio y hechizo, cuando me respiras insólita alimentando toda incertidumbre.

Y entonces desde tus omóplatos, en todo costado de norte a sur en tu anatomía, -me hallo- en la patria de la pasión de tus ganas, plantas la bandera sin colores e instalas la capital de lo bello en nuestro cuarto.

Nada más redentor que el silencio del mundo hasta que despiertas, tu voz engalana toda forma y el universo cobra sentido.

- Adolfo Ibáñez