EL GRITO DE BANSKY.





Un Belén delante de un muro de hormigón con una estrella provocada por un impacto de bala, la imagen transgrede, invita e incita, es evocadora y provocadora a partes iguales. Mientras unos pegan plátanos a la pared, otros como impactos de bala certeros se instalan en nuestro cerebro para no salir jamás, la presentación tuvo lugar en el hotel “Walled Off” hotel situado en Cisjordania con vistas al muro hecho por Israel, el propio alojamiento es propiedad de Bansky, el belén se sitúa en una modesta mesa, y el resto ya lo ven ustedes mismos.

La obra es una metáfora en si misma, que encierra otras tantas, la propia estrella es un impacto de bala donde su propio contorno es perfilado con los restos de pólvora alrededor del boquete, pero también hace un juego de palabras “scar” significa cicatriz y “star” estrella, así escenifica de manera visual y literaria la escena, el titulo de la obra no podía ser otro que “La cicatriz de Belén”

Según el director del hotel la obra representa la vergüenza de la ocupación Israelí en territorio de Cisjordania, la obra cargada de una fuerza visual cuanto menos impresionante, juega desde el primer minuto con la conciencia de todos, transformando lo pacifico y bucólico del nacimiento con una sensación de desazón que desgarra.


Bansky demuestra que no solo tiene mucho “arte” que dar en el mundo del graffitti, y obras como estas merecen la mención, tendrá varias lecturas y auguro que mucha más polémica que un plátano pegado a una pared con cinta americana pero incluso la comparación me parece grosera, la performance del banano fue ser ingerido, en el caso de lo que nos retrata Bansky millones de personas lo viven a diario ante el descaro de la opinión pública internacional sin que parezca que nos conmueva demasiado, arte como este en mayúsculas igual sirve al menos para abrir nuestras conciencias.


Adolfo Ibáñez-Batista


*Imagen extraída de @publico.es 

Comentarios

Entradas populares