CAFÉ SUBURBIO. COVIDIOTA-19. ADOLFO IBÁÑEZ-BATISTA.
Desde el principio de la cuarentena
hemos asistido a una colección de estupideces que creí menester
nombrarlas, aunque el asunto es bastante complicado y los actos de
idiotez se suceden seguramente en este mismo momento, sin duda alguna
hay dos cosas claras; primero que nada es, que la ignorancia no
conoce limites ni fronteras y que sin lugar a la duda la estupidez
humana es el virus mas terrible al cual no le hemos encontrado vacuna
y que tampoco se le espera además.
Encontrar un antídoto es un asunto
trillado, aunque muchos receten sentido común -que ya saben es el
menos común de los sentidos- los actos de imprudencia
estúpida/temeraria se han sucedido a lo largo de todo el proceso, no
piensen que en nuestro suelo patrio/matrio es donde mas estupidez
existe, es más bien, por ponerle filtro a la desbandada absurda
mundial que se nos venía encima, vamos que no tendríamos lunes este
año para enumerarlos todos. Algún día recordaremos todos estos
hechos hasta entre risas, pero es hasta perverso las cosas que se nos
pasan por la cabeza en estos tiempos -que sirva para los aquí
retratados como tonto consuelo- en que el mundo esta patas arriba.
Afortunadamente la mayoría de los
actos han sido reprendidos con multas e incluso con detenciones,
estos villanos de la pándemia tienen nombre y apellidos espero que
me pasen por alto no citarlos, que ya tienen bastante con el cerebro
que les vino equipado de serie como para yo hacer más leña del
árbol caído. En los primeros días cuando las calles estaban
desiertas un señor desde la cámara de su celular comenzaba diciendo
“Una maravilla ver la ciudad así” haciendo un barrido de la
ciudad de los adelantados vacía, bueno aquí empezaba hasta bien,
pero el drama de lo absurdo se iba a cernir sobre nosotros...
Seguía después: “Y mientras bueno,
quédate en casa...” continuaba su soliloquio con: “quédate en
casa por que alguien ha decidido que te quedes en casa” ya nos
veíamos que iba a tocar la cima del despropósito cuando sentencia
“Yo me quedo en casa si quiero” para culminar con “un abrazo a
todos”
El final fue cuanto menos cariñoso,
pero claro, estaba prohibido salir, ponían multas a los que jugaban
por esas fechas con la salud de todos, como no podía ser de otra
manera el vídeo de este señor se hizo viral, escribió su capítulo
final con la consiguiente multa. Estupideces se han cometido todos
los tiempos, pero ahora tenemos unos artilugios que hacen que los
mismos que cometen las tontadas las hagan públicas.
Pensábamos que con este señor lo
habíamos visto todo, pero estábamos siendo demasiado ingenuos,
incluso algunas frases de lo que se nos venía encima – más bien
de lo que se nos caía- era aún peores que eso de “Yo me quedo en
casa si quiero” en el siguiente vídeo nos veíamos a un joven
descamisado con planos de una cala de rocas que sentenciaba “Al que
se moleste que se rasque” empezaba ya prometiendo...
“Y si no haces así “clic” y
sales del directo y te pones a ver la tele o lo que estabas haciendo
estos quince días atrás y ya esta es así de sencillo” permitanme
aquí el paréntesis (nunca entendí el concepto espacio tiempo de
este muchacho) continuaba con esta constructiva reflexión “Y la
pena es que no me pueda bañar con el móvil, que no aguanta el agua
porque si no me baño con el móvil también” por ultimo manifiesta
de manera clara lo que pretende y es que se ve que además de viajero
en el tiempo era “profeta” diciendo “porque ahora lo que voy a
dar es por culo por pesados ya me tocaron la pinga, venga hombre, lo
que me faltaba ya hombre, con lo amargado que están todos, saben que
les digo; Ustedes van a llegar todos gordos y blancos al verano y yo
voy a llegar morenito y fuerte, es lo que hay -sonido inteligible- y
al que le pique que se rasque” por si no era suficientemente
gráfica su descripción dirige un corte de mangas a su anonadada
audiencia con un casi tímido “toma” entre dientes, el vídeo
termina así en un directo de Instagram, tal vez en ese mismo momento
le estaban esperando una pareja de la Guardia Civil, no se como irá
su bronceado y aún nos tendrá que explicar como se pone uno fuerte
yendo a la playa, la cosa es que fue detenido, y la imagen de este
muchacho -empeñado en dar por culo a todos- esposado por dos agentes
de la benemérita se hizo aún más viral que el vídeo con el cual
le detuvieron.
Esto solo son dos casos que nos tocan
muy de cerca, pero también en las mas altas instancias hemos tenido
frases para la posteridad, la Ayuso creo que va a una por semana,
como aquella de “Covid-19 por que se descubrió en Diciembre” o
la de “Es que esto nos ha unido con los extranjeros por que tenemos
un A.D.N. parecido”también sera recordado por todos cuando decía
esto del ICFEMA “Es que se ha descubierto que los techos altos en
los hospitales hace que sea más fácil combatir el virus.
Lo que esta más que claro es que la
estupidez humana no conoce límites, no sabe de fronteras, no conoce
de ideologías políticas y como mencione anteriormente se propaga
con una celeridad más vertiginosa que cualquier virus descubierto y
me aventuro a pronosticar que también por descubrir, ni con la ayuda
de los mejores científicos o filósofos vamos a dar con la vacuna,
así que ha tomárnoslo con calma que queda estupidez para rato, el
titulo del artículo es invención de los ingleses solo tuve que
traducir, ya saben seamos cautos la estupidez nos acecha y ningún
animal pensante de este planeta esta a salvo.
Adolfo Ibáñez-Batista
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